Mesotelioma pericárdico
El mesotelioma es un cáncer en el mesotelio, una membrana que rodea muchos órganos. El mesotelioma pericárdico es un cáncer en el revestimiento del corazón, llamado pericardio. Constituye menos del uno por ciento de todos los casos de mesotelioma. Aunque el pronóstico es desfavorable, la cirugía, la quimioterapia y otros tratamientos pueden prolongar la supervivencia.
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El mesotelioma es un tipo de cáncer que surge en el mesotelio, que es una membrana que rodea diversos órganos. El mesotelioma pericárdico es un tipo muy poco frecuente de mesotelioma que aparece en el pericardio, que es una membrana que rodea el corazón. Esta enfermedad tiene un pronóstico global desfavorable, aunque el tratamiento puede prolongar la supervivencia.
Causas y factores de riesgo del mesotelioma pericárdico
El mesotelioma pericárdico es uno de los tipos menos frecuentes de mesotelioma. El mesotelioma pleural (que se encuentra en la membrana que rodea los pulmones) representa más del 80 por ciento de los casos, mientras que el mesotelioma peritoneal (que se encuentra en la membrana que rodea el aparato digestivo) representa entre el 10 y el 15 por ciento de los casos. Por otra parte, el mesotelioma pericárdico representa menos del uno por ciento de todos los casos de mesotelioma. En la literatura científica solo se han registrado unos cientos de casos de mesotelioma pericárdico.
En general, la exposición al asbesto es el factor de riesgo más importante para el desarrollo del mesotelioma. Más del 80 % de todos los pacientes con mesotelioma pleural y hasta la mitad de los pacientes con mesotelioma peritoneal tienen antecedentes conocidos de exposición al asbesto. Sin embargo, en el caso del mesotelioma pericárdico, la relación con la exposición al asbesto es menos evidente. Los investigadores creen que existe un vínculo entre el asbesto y el mesotelioma pericárdico, pero no parece ser tan sólido como en el caso de otros tipos de este cáncer. Solo el 25 % de los pacientes con mesotelioma peritoneal señalan tener antecedentes conocidos de exposición al asbesto.
Se sabe que el asbesto es extremadamente cancerígeno. Cuando las fibras de este mineral se introducen en los tejidos, provocan una fuerte respuesta inmunitaria, ya que el organismo intenta deshacerse del material extraño. Como el asbesto es muy estable químicamente, la respuesta inmunitaria no puede destruirlo. Por esta razón, la respuesta inmunitaria se mantiene durante muchos años, lo que puede dañar el ADN de las células y hacer que se vuelvan cancerosas.
En el caso del mesotelioma pleural y peritoneal, los científicos comprenden cómo las fibras microscópicas de asbesto son capaces de introducirse en el mesotelio y provocar el cáncer. Sin embargo, es más difícil determinar cómo llegan las fibras de asbesto al pericardio. Una teoría es que pasan de la pleura al pericardio, ya que las dos membranas son adyacentes. Esta es una explicación plausible, ya que las fibras de asbesto son largas, finas y afiladas.
Síntomas del mesotelioma pericárdico
El mesotelioma pericárdico puede causar diversos síntomas, entre ellos:
- dolor en el pecho o en el hombro
- dificultad para respirar
- dificultad para tragar
- latidos irregulares o palpitaciones del corazón
- soplos cardíacos (sonidos inusuales que se oyen al auscultar el corazón con un estetoscopio)
- hinchazón de las piernas
- fatiga
- pérdida de peso inexplicable
Debido a que los síntomas son muy generales, pueden estar causados por una variedad de afecciones diferentes. Múltiples afecciones cardiacas diferentes podrían causar síntomas similares, incluidas la insuficiencia cardiaca congestiva o la pericarditis (inflamación del pericardio, normalmente causada por un virus). Ya que los síntomas son tan poco específicos y al tratarse de un cáncer tan poco frecuente, el diagnóstico del mesotelioma pericárdico es difícil.
Diagnóstico del mesotelioma pericárdico
El proceso de diagnóstico del mesotelioma pericárdico comienza cuando el paciente visita a un médico para hablar sobre los síntomas. Al principio, el médico considerará las posibles causas de estos síntomas. Después, el proceso de diagnóstico se irá haciendo más específico hasta llegar al mesotelioma pericárdico. Los pasos de este proceso suelen incluir:
Una biopsia
This is a small sample of tissue that’s examined in a lab to determine whether it contains cancer cells and, if so, what type of cancer the patient has. A biopsy is required to definitively diagnose pericardial mesothelioma.- Frecuentemente, la biopsia se obtiene durante un procedimiento quirúrgico conocido como toracoscopia. Durante este procedimiento, un cirujano torácico realiza pequeños cortes en la pared torácica e introduce un endoscopio. Esto permite al cirujano ver el interior de la cavidad torácica mediante una cámara de vídeo y tomar muestras de tejido utilizando instrumentos quirúrgicos especialmente diseñados.
- En algunos casos, se utiliza un procedimiento quirúrgico más extenso para realizar la biopsia y determinar el diagnóstico. Es posible que los médicos tengan que examinar directamente el corazón y tomar muestras de tejido del pericardio para determinar el diagnóstico.
No es inusual que los casos se diagnostiquen después de la muerte del paciente, cuando se detecta el cáncer en una autopsia. De hecho, solo el 25 % de los casos de mesotelioma pericárdico se diagnostican definitivamente antes de la muerte del paciente.
Estudios de imagen
Durante el proceso de diagnóstico pueden utilizarse diversos estudios de imagen:
- Inicialmente puede realizarse una radiografía de tórax para buscar problemas en los pulmones o la cavidad torácica. En los pacientes con mesotelioma pericárdico, la radiografía de tórax puede mostrar hallazgos como un engrosamiento del pericardio o un derrame pericárdico (acumulación de líquido alrededor del corazón).
- A continuación puede realizarse una tomografía computarizada (TC) del tórax para comprobar los hallazgos preocupantes en la radiografía de tórax, o puede ser la elección inicial de estudio de imagen. Se trata de un tipo de exploración más detallada que utiliza rayos X para generar una imagen tridimensional de una parte concreta del cuerpo.
- Un ecocardiograma es un tipo de ecografía que utiliza ondas sonoras para visualizar el corazón. Esta prueba permite a los médicos observar el funcionamiento del corazón mientras late.
- Una tomografía por emisión de positrones, que utiliza un trazador para comprobar la presencia de células cancerosas en todo el cuerpo, puede ser útil para que los médicos detecten metástasis, es decir, la propagación del cáncer a otros órganos.
- Una resonancia magnética también puede ser útil. Esta es una exploración detallada creada mediante un campo magnético, que puede ayudar a los médicos a localizar el tumor y comprobar si hay metástasis.
Etapas del mesotelioma pericárdico
La fase o etapa de un cáncer se refiere a cuán avanzada está la enfermedad. Mientras que el mesotelioma pleural tiene un sistema de estadificación formalmente definido, otros tipos de mesotelioma, incluido el mesotelioma pericárdico, no lo tienen. No existe un conjunto oficial de criterios utilizados para determinar el estadio de un caso concreto de mesotelioma pericárdico.
En general, se suele utilizar un sistema denominado TNM para describir la etapa de un cáncer. Éste utiliza información sobre el tamaño y la extensión del tumor original (T), la propagación a los ganglios linfáticos (N) y la propagación a partes distantes del cuerpo (metástasis, o M). Los médicos evaluarán estos factores durante el proceso de diagnóstico utilizando los resultados de los estudios de imagen, la biopsia y la toracoscopia. También pueden utilizar la información obtenida durante la cirugía.
Habitualmente, los tres factores del sistema TNM se utilizan para determinar un estadio numérico. El más precoz es la fase o etapa 1, en la que el cáncer está localizado en el tejido donde se desarrolló por primera vez. El más avanzado es el 4, en el que el cáncer se ha extendido ampliamente por todo el cuerpo. Aunque no existe un sistema formal para convertir el sistema TNM en un estadio numérico para el mesotelioma pericárdico, algunos médicos pueden estimar un estadio numérico basándose en diversos factores del cáncer. Frecuentemente, el mesotelioma pericárdico se diagnostica en un estadio avanzado.
Esperanza de vida del mesotelioma pericárdico
El mesotelioma pericárdico es un cáncer agresivo y generalmente supone un pronóstico desfavorable. Un estudio realizado en 2017 reveló que la esperanza de vida promedio tras el diagnóstico es de solo 5,6 meses. Otro estudio publicado en 2021 mostró un promedio de supervivencia de solo dos meses. Después del diagnóstico, solo el 22 % de los pacientes con mesotelioma pericárdico sobrevive un año, mientras que el 12,2 % sobrevive dos años.
A pesar de estas cifras, informes de científicos han registrado casos de pacientes que vivieron durante años después de su diagnóstico. El informe de un caso describe a una mujer que está viva y libre de enfermedad 28 años después de su tratamiento por mesotelioma pericárdico. Aunque esta enfermedad tiene un pronóstico desfavorable en general, es posible obtener buenos resultados en los pacientes.
Tratamiento del mesotelioma pericárdico
Debido a que el mesotelioma pericárdico es una enfermedad tan rara, a los investigadores médicos les resulta difícil determinar cuál es la mejor forma de tratar esta enfermedad. Sin embargo, basándose en los tratamientos que son eficaces para otros tipos de mesotelioma (como el mesotelioma pleural), han podido encontrar formas de tratar esta enfermedad. El plan de tratamiento puede incluir uno o más de los siguientes:
La radioterapia se utiliza en pacientes con mesotelioma pleural y peritoneal, pero hasta ahora no ha demostrado ser eficaz en el tratamiento del mesotelioma pericárdico. La inmunoterapia está aprobada para determinados pacientes con mesotelioma pleural, pero no se ha aprobado para otros tipos de mesotelioma. Su uso en pacientes con mesotelioma pericárdico se consideraría experimental.
Su médico hablará con usted sobre el plan de tratamiento específico recomendado en su caso. Su tratamiento dependerá de muchos factores, como el estadio de su cáncer, su edad y su estado médico general, y sus preferencias.
Cirugía
Se trata de extirpar la mayor cantidad posible de tejido tumoral visible del tórax. Algunos estudios han descubierto que esta cirugía aumenta la supervivencia. A veces se utiliza una cirugía más radical llamada pericardiectomía, que extirpa todo el pericardio de alrededor del corazón. En general, no se ha demostrado que aporte un beneficio de supervivencia en pacientes con mesotelioma pericárdico, pero los médicos pueden recomendarla en determinados casos.
Quimioterapia
Un estudio realizado en 2019 reveló que la quimioterapia sistémica (en la que los medicamentos se administran a todo el cuerpo por vía intravenosa) aumentaba el promedio de supervivencia a 13 meses. Esto es considerablemente mayor que la supervivencia habitual de los pacientes con este cáncer, por lo que se suele recomendar la quimioterapia. Los médicos suelen utilizar la misma combinación de medicamentos que resulta eficaz para el mesotelioma pleural y peritoneal. El tratamiento incluye cisplatino o carboplatino, a menudo combinados con pemetrexed.
Procedimientos paliativos
Al igual que la pericardiocentesis, un médico utiliza una aguja para extraer una acumulación de líquido alrededor del corazón. Esto puede aliviar los síntomas y mejorar el estado general. Otros tratamientos paliativos, como la medicación prescrita para el dolor, también pueden ser útiles para muchos pacientes.
Ensayos clínicos para el mesotelioma pericárdico
Aunque las opciones de tratamiento actuales para el mesotelioma pericárdico son limitadas, se espera que nuevas investigaciones ayuden a desarrollar mejores tratamientos.
Algunos pacientes optan por participar en ensayos clínicos. Este es un estudio de investigación para probar un nuevo tratamiento o una nueva combinación de tratamientos. Aunque a muchos pacientes les atrae la posibilidad de obtener un acceso temprano a una nueva opción de tratamiento, es importante tener en cuenta las ventajas y desventajas. Si le interesa esta opción, consúltelo con su oncólogo, que puede ayudarle a valorar los pros y los contras de participar.
Para conocer sobre ensayos clínicos recientes, consulte la base de datos de ensayos clínicos del Instituto Nacional del Cáncer. Debido a que el mesotelioma pericárdico es tan poco común, los investigadores no suelen realizar estudios de este cáncer específicamente, ya que llevaría demasiado tiempo encontrar suficientes pacientes para obtener una muestra estadísticamente significativa.
Sin embargo, los pacientes con mesotelioma pericárdico pueden participar en ensayos clínicos que incluyan varios tipos diferentes de cáncer. Por ejemplo, los ensayos que prueban tratamientos para «tumores sólidos no extirpables» podrían incluir potencialmente a pacientes con mesotelioma pericárdico. Cuando busque ensayos para los que pueda ser elegible, es posible que tenga que utilizar términos más amplios como éste. Su oncólogo también puede ayudarle a encontrar ensayos para su caso en concreto.
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